El pasado domingo se cumplieron 71 años de la Tragedia del humo, el mayor accidente minero a nivel mundial, que acabó con la vida de 355 personas, en la Mina el Teniente (Chile) y que, todavía hoy, es recordado como uno de los hitos más tristes de la historia del país.
El accidente se produjo el 19 de junio de 1945, cuando un incendio en una fragua situada en uno de los portales de acceso a la mina liberó emanaciones de monóxido de carbono.
Las malas condiciones de seguridad de la mina unidas a la falta de ventilación, imposibilitaron la huida de los mineros, desembocando una catástrofe de magnitud nunca antes vista.
La mayor parte de los mineros muertos se encontraron en socavones y cámaras que se habían llenado de humo, mientras que unos pocos afortunados lograron salvarse, abriendo las llaves de aire comprimido de las redes de la mina, o evacuando por una instalación que ya no se utilizaba.
Después del suceso, se iniciaron varios procesos judiciales para determinar los responsables del incendio inicial. Mientras tanto, el Congreso también llevó a cabo una investigación paralela para esclarecer el papel que había jugado la empresa estadounidense en el asunto.
Después del suceso, se cambió por completo la legislación laboral chilena, asegurando importantes mejores en el nivel de higiene industrial y la prevención de riesgos.
